Ocurrió un 25 de agosto de 1812...

El general Pedro Villacampa Maza de Lizana interceptó y derrotó en el paraje de El Tollo, entre Utiel y Caudete de las Fuentes, a un cuerpo de ejército francés que, comandado por el barón de Maupoint, se dirigía a Valencia, siguiendo ordenes del mariscal Suchet.

En la segunda mitad de la Guerra de la Independencia, parte de los planes de Napoleón pasaban por realizar un ataque en el Levante para ocupar Valencia, a la vez que comenzaba a retirar tropas de España para incorporarlas al contingente bélico con el que pretendía atacar Rusia.

En octubre de 1811 el general Suchet tomó Sagunt después de un largo asedio y el 14 enero de 1812 entró en Valencia cruzando el río Turia por el puente de San José. Napoleón le nombró mariscal del imperio y conde de La Albufera. Suchet mantuvo Valencia, a la vez que sus tropas eran hostigadas por las guerrillas de José Romeu y Asensio Nebot.

Repliegue desde Cuenca...

Extraido de Wikipedia y ampliado por Héroes del Tollo.

El 22 de julio de 1812, el Duque de Wellington al frente de un ejercito con tropas inglesas, portuguesas y españolas derrotó a un ejército francés, dirigido por el mariscal Auguste Marmot, muy superior en número. La victoria de Los Arapiles (Salamanca) supuso un punto de inflexión en la guerra.

El mando francés planeó la salida de Madrid de José Bonaparte y Suchet ordenó al gobernado militar de Cuenca, el barón de Maupoint, el agrupamiento de las tropas francesas en esa provincia y su repliegue hasta Valencia. El 22 de agosto Maupoint salió de Cuenca con destino a Valencia siguendo el camino real de Madrid, por Caudete, Utiel y Requena.

El mando español tuvo noticias previas de los planes de los franceses y el general O’Donnell ordenó al general Villacampa, acampado en esos momentos en Ateca (Zaragoza), que saliera a interceptar a las tropas francesas. Villacampa partió de allí el 15 de agosto con 1.974 hombres, con destino a Utiel.

Encuentro en el Tollo...

Según el historiador utielano José Luis Martínez Martínez, conocedor en profundidad de este hecho bélico, Villacampa llegó al amanecer del 25 de agosto de 1812 a Utiel, supo que los franceses habían pernoctado en Villargordo, a poco más de una decena de kilómetros de Utiel, y fue a su encuentro en dirección a Madrid.

El general «coloca a la derecha de la línea del camino real a los voluntarios de Aragón, el segundo batallón de la princesa ocupa el centro, y a la izquierda a los voluntarios de Molina. Deja en la reserva el segundo regimiento de Soria y las compañías de caballería de Aragón. A la vez que ordena que no se rompa el fuego hasta que la vanguardia enemiga esté a la altura de los voluntarios de Aragón», explicó el historiador.

Entre las 6 y las 7 de la mañana aparecieron los franceses con la caballería seguida de la infantería y en el centro dos piezas de artillería. Con tales precauciones era imposible sorprender a los franceses y el batallón de Molina abrió fuego contra el primer batallón francés, que encontró una posición ventajosa en un collado, donde dispuso las piezas de artillería.
Villacampa acudió con el batallón de reserva en auxilio de los de Molina y detuvo el avance francés, obligándole a retirarse y a dejar un cañón en el campo de batalla. Mientras los de Aragón y los húsares de la caballería cargaron contra los contrarios y decidieron la acción a favor de los españoles.

En cuatro horas, las tropas españolas obligaron a los franceses a batirse en retirada y refugiarse tras las murallas de Requena. En el campo dejaron dos cañones, numerosos pertrechos, munición, intendencia y 126 prisioneros, además de decenas de heridos en Requena y Buñol.

La Acción de Utiel le valió a Villacampa ser condecorado con una de las primeras Cruces Laureadas de San Fernando que impuso Fernando VII tras su regreso a España.

La Cruz Laureada de San Fernando…

Cruz de distinción por la Acción de Utiel

“Enterado el rey nuestro señor de la instancia hecha por varios oficiales de la segunda división del extinguido segundo ejército de operaciones en solicitud de una cruz de distinción en premio del mérito que contrajeron en la brillante acción que sostuvieron en los campos de Utiel el día 25 de agosto de 1812, en la cual batieron completamente a los enemigos, a pesar de ser superiores en número, tomándoles además su artillería y bagajes; ha tenido  S. M., condescendiendo con dicha solicitud, y para darles una prueba de su aprecio, en permitir a cuantos individuos de armas tuvieron parte activa en la acción el uso de una cruz de distinción, que, conforme al diseño aprobado, será semejante a la de los caballeros de la orden de San Juan, con corona de laurel sobre el brazo superior: en el horizontal, pero en su parte inferior, tendrá una cartela con el lema siguiente escrito con esmalte negro: Acción de Utiel; encima de él dos cañones con sus cureñas, y sobre ellos, de modo que solape el brazo superior por ambos lados, la letra mayúscula F y el número árabe 7, montados al aire ambos signos; y todo pendiente del cuello con una cinta dividida por su largo en tres partes iguales, siendo la del medio de color de oro, y la de los lados exteriores de color blanco.

“La calificación del derecho de los aspirantes a dicha distinción será peculiar de la junta establecida en esta capital, en conformidad de la real resolución de 29 de mayo último. De orden de S. M. lo comunico a V. para su inteligencia y efectos correspondientes. Dios guarde a V. muchos años. Madrid, 20 de junio de 1815.”

ARCHIVO HISTÓRICO NACIONAL. Depósito de la Guerra. Diversos-colecciones, 74, N. 26